¿Nunca te ha pasado que tu gato sale a pasear cada día y no sabes donde se mete o qué hace? Claro, posiblemente está en medio de una masacre a una familia de ratones o de gorriones, o bien tomando el sol en otro techo… ¿quién sabe? Pero es también común que se vayan a otras casas para pedir comida, porque así son los gatos y ellos deciden dónde hay más «cariño», así que no los culpes cuando deciden sacarte la vuelta y abandonarte por otro humano.
Esto es justamente lo que sucedió con Nala, una gatita californiana que un día regresó de sus andanzas con una nota atada a su collar (su foto es la que encabeza este post). Cuando el novio de su humana la leyó se sorprendió mucho y acabó posteandola en reddit:
Traduciendo:
«No sé a quién pertenece este gato, pero viene a visitarnos cada semana. Maúlla frente a nuestra puerta trasera hasta que la dejamos pasar, se frota en nuestras piernas, pasea por la casa como si fuera suya, espera junto a la nevera hasta que mi marido o yo le damos alguna chuchería de comer. ¡No le gusta mucho nuestra comida para gatos! Nos encantan sus visitas. Este año perdimos a nuestro gato de 21 años».
Y aquí viene lo bueno, a raíz este post los internautas empezaron a su vez a comentar casos similares que han vivido de gatos que, no haciéndoles suficiente con adueñarse de las casas de sus humanos, se adueñan además de las de los vecinos. He aquí algunos de ellos, tanto en el post original como en el resto de redes sociales:
Podría parafrasear un dicho: «Si amas a un gato déjalo ir. Si regresa eres suyo, si no es que nunca lo fuiste».
Y eso seria todo. Hasta la próxima.