Un poco de realidad (aunque tenga bastante de melodrama) nunca le va mal al anime.
Una niña en su primer año de secundaria de nombre Mirai Onozawa empieza sus vacaciones de verano sin grandes expectativas y hastiada de la vida que lleva, de su ciudad, de su familia… Como Yuuki, su hermano de primaria, quiere ir a Odaiba para ver una exposición de robots, la madre de ambos le encarga que lo lleve, pues ella no puede acompañarlos por el trabajo, y así a regañadientes llegan a la isla artificial con Mirai preguntándose si algo bueno le sucederá alguna vez en su vida y que quizás lo mejor sería que todo fuera destruido. Y pensado y ocurrido ante sus propios ojos: un devastador terremoto de magnitud 8.0 en la escala de Richter asola la región de Kanto y deja a Mirai y Yuuki sin posibilidad de regresar a su casa si no es caminando. Es así que comienza la odisea de los dos hermanos junto a Mari, una mujer que hace repartos a domicilio y que conocen en Odaiba, la cual se ofrece cuidarlos para llegar juntos con sus familias (la de ellos y la suya)… si estas están aún vivas.
Esta serie, prevista para 11 episodios, que comenzara a ser transmitida el pasado 9 de julio, y que vino a reemplazar a Eden of The East en el espacio noitanimA de la Fuji TV, puede que haya tenido un inicio algo fofo, pero con el desarrollo del drama se ve como una emotiva historia que no desdeña algunas partes más ligeras. Y es que la historia, aunque cayendo un poco en lo melodramático a veces, tiene ese aire de tragedia minimalista que le dan sus personajes atrapados dentro de la confusión y la conmoción de un desastre natural que altera su mundo conocido, dejándolos a su suerte y obligados a reencontrar sus lazos y confiar en que las cosas saldrán bien. Es una curiosidad ver los símbolos de un país tan marcado por el avance tecnológico, como ser la Torre de Tokyo, el Puente Arco Iris… derrumbándose mientras la gente deambula esperando o marchando a algún lugar. La productora, Bones, sobre esto «ha comentado de que los efectos y las situaciones son bastante realistas, basadas en investigaciones, entrevistas y terremotos previos que les han afectado», algo que ya de por sí advierten al inicio de cada episodio. En todo caso su plausibilidad no nos es nada ajena para los vecinos del Cinturón de Fuego del Pacífico, región de grandes temblores y terremotos.
La página oficial aquí. La serie puedes ir viéndola acá.
Acá el opening a cargo del grupo Abingdon Boys School: Kimi no Uta.
Video subido por kanae396. Lo puedes ver aquí.
Acá el ending cantado por Shion Tsuji, M/elody.
Video subido por ThexDHunter. Lo puedes ver aquí.
La Yapa: