[Pata de Palo]
Para hacer un lol-cat vale todo. Si no me creen lean el post del amigo Shigure sobre los “gatos empanados” o Breading Cats. Así pues, a un periodista danés en el 2006 se le ocurrió subir fotos de gatos blancos que tenían marcas negras bajo sus narices asemejando el bigote de cierto difunto dictador alemán y así nació (además de la web Cats That Look Like Hitler en la cual desde entonces sigue recopilando fotos de ese tipo) el kitler, que no es otra cosa que el sobrenombre que se les da a esos mininos que por azares de la coloración tienen ese patrón en sus caras.
Y entre los gatófilos siguió corriendo el meme, y así se pueden encontrar muchas fotos de estos singulares gatos, exhibiendo sus colores sin saber todas las frikis asociaciones de ideas que nos dan. Una pose más fascista por acá, un cartelito relacionando ratones y judíos por allí, etc. Si seremos. Incluso un gato británico de esta guisa tuvo sus cinco minutos de fama el 2011 cuando The Telegraph publicó una crónica acerca del problema que los cuidadores del refugio para animales donde estaba alojado tenían para conseguirle un hogar, según ellos acaso porque “sus marcas insólitas” asustaban a la gente (sic). Bueno, gracias al eco que tuvo la noticia no tardaron mucho en aparecer cientos de personas interesadas, y así este “kitler” consiguió sus humanos.
¡Qué más da! Una foto de gato siempre cae bien, aunque algunos “kitlers” lucen con una cara de estar pensando seriamente en su “solución final”. Sí, ellos también quieren conquistar el mundo.
Acá una presentación de Flickr con fotos de estos gatos:
La Yapa: ¡Oh rayos! Yo quiero una de estas alcancías. Shut up and take my money!
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